lunes, 1 de julio de 2013

EL DÍA DE LA PRESENTACIÓN

Posted by Isabel Martín Hernández in 12/29/2012

Ha pasado un mes desde que acudí al pueblo para hacer la presentación del libro. El lunes 26 de noviembre del 2012 quedará para el recuerdo.
Por la mañana me levante bastante mal. Tenía frío, nervios y una especie de tortícolis. Me dirigí a la cocina, me puse pegada al calorcito de la cocina de leña, desayuné, me tome una pastilla para el dolor, y dos tilas que me hizo mi madre. Me preparé para el acto, y algo antes de las 12 acudí al Ayuntamiento al encuentro de Paco Blanco, el director del Instituto de las Identidades.
Cuando llegué aún era algo pronto. Allí no había nadie. Subí al salón para ver que todo estaba bajo control. El día anterior, habían estado Luisa y Mari José dejando todo al detalle. Luisa trajo de su casa el mantel para la mesa y unas flores ¡Quedó estupendo!
No habían transcurrido cinco minutos y allí llegó Paco, puntual como un reloj. Enseguida notó que estaba nerviosa. No comprendía cómo una tamborilera acostumbrada a tocar para el público podía tener nervios. Al instante llegó mi amigo Manolo, el de la Web, y su hermana Luisa.
El cuerpo ya había entrado en calor. Los rayos de sol alumbraban la mañana. Comenzó a llegar gente y más gente. En ese momento, todo empezó a transcurrir de otra manera. Yo ya no me acordaba de los nervios. El salón se llenó. Tuvieron que subir más sillas ¡Fenomenal!
Me encontraba en mi salsa con la gente de pueblo, hablando con unos y con otros. En ese momento llegó el Diputado de Cultura Don Manuel Tostado. Él me cedió el sitio para que me sentase en medio.
Comenzó a hablar el señor alcalde Don José Benedicto; y a continuación Don Manuel. Me emocioné bastante con las palabras que dijo. Fue un discurso muy cercano. Cuando acabó, era mi momento. “Animo, Isa”, pensé. Cogí aire. Comencé, continué y acabé. Yo misma me emocioné con mis propias palabras. Según iba hablando, me estaba acordando de mucha gente con la que pasé tardes de charla y también de personas que siempre me han estado animando. Al finalizar, cuando dije algo así como: “Pues si nadie tiene ninguna pregunta, pues vamos al convite”, me acorde de aquel tamborilero de la leyenda que después de haberle dado toda su merienda a los lobos, sacó la flauta del macuto, y les dijo: “Pues si ahora queréis echar un baile”.
A día de hoy, recordando el momento en el que comencé a recoger relatos en un simple cuaderno, no me podía imaginar que aquello tomase forma, forma de libro. No sé, supongo que desde un principio tenía la ilusión de que se hiciese realidad, pero hasta que el momento no llega, parece algo imposible.
Muchas de las historias que han ocurrido han quedado a salvo en el libro. Otras, quizá, se perderán para siempre. Mientras siga existiendo La Zarza y sus gentes, nuevas historias nacerán.
Os quiero dar las gracias a todos. Si no hubiese existido este blog, creo yo que no habría escrito el libro, ya que vuestros comentarios han sido el motor de arranque, el impulso para seguir escribiendo, la información directa… Gracias de corazón.

No hay comentarios:

Publicar un comentario